Medio centenar de jóvenes de diferentes iniciativas comparten en un encuentro sus experiencias altruistas.
La solidaridad fue el nexo de unión, entendimiento y celebración de medio centenar de jóvenes de Gipuzkoa en un encuentro de intercambio de experiencias altruistas desarrolladas a lo largo del año en sus grupos de procedencia. La coincidencia de Nomadak, Ostarte, Batuz y el colegio de la Inmaculada de Hernani en un mismo foro de exposición estuvo aderezada por la imaginación y la creatividad derrochada en las iniciativas solidarias narradas en formato de imagen. No faltaron jóvenes del Gazteleku de Kontadores como tampoco amigos que dan rienda suelta a su poder de creación con rap o poesía. Y todo ello en una antigua parroquia, hoy día rehabilitada como espacio de encuentro y de celebración de propuestas de ocio para destinatarios de programas de Cáritas que atiende al nombre de ‘Zurekin bat’ (A una contigo). Un vídeo sobre la solidaridad predispuso al gran grupo a participar del marco común, y por aquello de la necesidad de atemperar los nervios de toda novedad una dinámica de presentación ayudó a superar la timidez y a estrechar los lazos de cercanía. El vídeo inicial arrancó el serial de creaciones audiovisuales con las diferentes actividades impulsadas por los grupos de procedencia a favor de otros. El modelo de presentación en pantalla halló una versión original en el formato en directo utilizado, pro ejemplo, por Nomadak a golpe de baqueta sobre tambores y platillos de batería. Todo un ejemplo de la fuerza cautivadora de la representación en directo, que reforzó aún más el buen ambiente.
La experiencia de otros
La sesión tuvo un punto de inflexión con la salida por grupos, entremezclados con jóvenes de distintos puntos de referencia, por diferentes itinerarios de Donostia y su entorno al encuentro de personas que hacen de su vida una muestra cotidiana de desprendimiento a favor de otros. Sacerdotes, religiosas y personas anónimas con un profundo sentido de la vida y un mayor entusiasmo por hacerla más llevadera a otras que tratan de reencontrarla, recibieron a los jóvenes con los brazos abiertos en una tertulia improvisada que no les dejó indiferentes.
Sus propias conclusiones, recogidas en un soporte de papel, fueron compartidas al regreso de las salidas. Un titular, una imagen...., en cada exposición resumieron las buenas sensaciones. Una cena puso el colofón a una tarde donde la solidaridad y el ambiente sano y cordial encendieron los corazones de jóvenes animosos y animados por causas justas y, por encima de todo, humanas.
