Durante una semana del mes de diciembre, un nutrido grupo de jóvenes de 16-18 años ha compartido con los hermanos de Roma la casa de Torre Maura. Lo han hecho en dos grupos, de 6 y 7 personas, y acompañados por sus catequistas Carlo y Marta, puesto que se trata de jóvenes de la parroquia del barrio.
Han querido conocer qué significa ser comunidad y cómo eso se puede traducir en sus vidas. Compartir lo cotidiano (el ritmo de trabajo y estudios, la oración, las comidas, los servicios...) ha sido una experiencia sencilla y honda que nos ha ayudó a todos a preparar el corazón para la Navidad.
La casa no sólo se ha llenado de gente y risas, también de esperanza, de jóvenes que creen en Jesús y quieren dejarle nacer en ellos. Como hemos repetido tantas veces esos días: “Han sido nuestro regalo de Navidad adelantado”. Gracias a todos!!